Andábamos desnudos
Pandemia, muerte, enfermedad parecían palabras extrañas, para designar la suerte de otros, la mala suerte de otros. Hoy crecen a nuestro alrededor para recordarnos aquello que parecía eliminado de nuestra conciencia colectiva.
Pandemia, muerte, enfermedad parecían palabras extrañas, para designar la suerte de otros, la mala suerte de otros. Hoy crecen a nuestro alrededor para recordarnos aquello que parecía eliminado de nuestra conciencia colectiva.
A las comunidades vulnerables de Bogotá no solo las amenaza el virus, hay otra amenaza que está presente todo el tiempo y que pareciera que nunca se pudiera conjurar. La cuarentena busca salvar vidas, pero no ha salvado a algunas de sufrir de hambre. En medio de todo esto, desde la psicología social y la antropología se observan unas maneras de intercambio colaborativo que dan esperanza.
La historia de las especies está representada en distintas carreras evolutivas por la supervivencia. En particular, la de los gérmenes y el sistema inmune de los animales vertebrados ha devenido en el desarrollo de mecanismos moleculares por llevar la delantera. Si hay alguien que pueda estar ganando esta carrera son los murciélagos.
Tener a la mayoría del país en su casa durante dos meses, con negocios y centros educativos cerrados, tiene costos para la economía nacional al reducir el empleo y el consumo de los hogares. Para muchos, que el país se quede en casa limita además sus posibilidades de compras básicas como el alimento.
Es probable que la reducción en las emisiones globales de CO2 para este año sea solo temporal, ya que no refleja cambios estructurales en los sistemas económicos, de transporte o energéticos. El nuevo virus no es la solución para combatir el cambio climático, pero podría ser una oportunidad.