Muchos de los inventos nacen de una manera desprevenida, los científicos e investigadores invierten un tiempo considerable de sus vidas buscando respuestas.
Para nuestra, fortuna la casualidad ha sido aliada de la humanidad en muchos casos. Recientemente, la especialista Federica Bertocchini, científica del Instituto de Biomedicina y Biotecnología de Cantabria España, descubrió que los gusanos de cera son capaces de degradar plástico.
Estos gusanos de cera, se alimentan de restos de miel y cera de las abejas; Bertocchini es apicultora aficionada y al encontrar que los panales almacenados de su casa estaban llenos de estos gusanos los retira dejándolos en una bolsa de plástico cerrada. Se ausentó unos minutos y al regresar para limpiar los panales se da cuenta que estos gusanos habían escapado llenando la bolsa de pequeños agujeros. Solo había una forma de entender lo que estaba pasando, los gusanos eran los responsables y se habían comido el plástico.
De inmediato empieza una investigación donde se realizaron análisis espectroscópicos para demostrar que los enlaces químicos del plástico se rompían. Gracias a los estudios que prontamente han realizado se concluye que estos gusanos pueden transformar el polietileno en etileno-glicol, que es un producto que puede degradarse fácilmente. Esta investigación ha sido acompañada por Paolo Bombelly y Chris Howe de la Universidad de Cambridge y se publicó en la revista Current Biology el 24 de abril
Las investigaciones siguen y este es, sin duda, un avance significativo para el planeta y la humanidad. Aún no se conocen detalles de cómo se da la biodegradación pero según los científicos puede ser gracias a una enzima. Al hallar la reacción y su mecánica molecular podría producirse de manera industrial en laboratorios, una alianza entre la naturaleza y la ciencia. ¿Se imaginan que estos gusanos puedan ayudarnos con el problema del plástico que tanto daño le hace a nuestra Tierra?
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